Posibles causas de la ingle y dolor en las piernas

Hay muchos factores que pueden contribuir a la ingle y dolor en las piernas. Esta es una de las dolencias más comunes que hacen que la gente visita a sus médicos. Ingle, la espalda y dolor en las piernas se experimentan debido a la fatiga, el uso excesivo, deformación u otros daños físicos. Hay 5 músculos de la ingle situados en el área que se une al abdomen y el muslo o músculos de la pierna. Cualquier tirón muscular o tensión en esta área pueden causar la ingle y dolor en las piernas. Usted puede sentir dolor al caminar o al sentarse. En algunos casos graves, cualquier movimiento de la cadera o de la pierna puede causar dolor severo.
Posibles causas
• Cepas - Estas son lágrimas o roturas de cualquier músculo en el área afectada. En el caso de la ingle y las lesiones musculares piernas, las causas pueden incluir movimientos bruscos, rápidos como el cambio de dirección al correr o moverse contra otra fuerza como una patada pelota. El uso excesivo también puede causar tensión muscular y provocar dolor.
• Lesión física - un golpe dirigido a la pierna o el área de la ingle puede causar lesiones. Otras lesiones físicas como caídas o tropiezos provoca la pierna para estar en una situación irregular y pueden causar dolor. Si usted pone un estrés adicional en la pierna o la ingle lesionada, puede experimentar hinchazón, también.
• Enfermedades - hernia puede causar dolor en la ingle a causa de los golpes que constantemente tocan la pared abdominal. Dolor en las piernas o ciática espasmódica es otra causa. Puedes hacer esto haciendo un uso excesivo o ejercer presión sobre el nervio que va a lo largo de la longitud de la pierna.
• Inflamación - Cuando el hueso de la pelvis tiene una inflamación o desarrolla osteítis púbica, esto puede dar lugar a dolor en la zona.
• Otros - tumores, cálculos renales, inflamación de nervios y ligamentos redondos pueden causar dolor en la pierna y la ingle, también. Los médicos deben ser consultadas en estos casos.
El tratamiento del dolor es por lo general depende de su causa. Los posibles tratamientos pueden incluir reposo, compresión, elevación y formación de hielo en la zona afectada. Estos pueden ser aplicados para las cepas, hinchazón, y lesiones menores. Medicamentos anti-inflamatorios también puede ayudar. La fisioterapia o los ejercicios de baja intensidad pueden ayudar aún más al paciente para prevenir más lesiones.